jueves, 30 de agosto de 2012

movimiento obrero del canal

1. El movimiento obrero en la primera fase (1903-1948)
El movimiento obrero panameño en la primera mitad del siglo XX es dominado por tres sucesivos momentos de integración y acumulación. Gandásegui apunta a tres momentos coyunturales en el período entre 1903 y 1948. En primer lugar, la crisis política de 1912 que es resuelta con la elección de Belisario Porras a la Presidencia de la República. La incorporación de la alianza Azuero – Santa Ana transforma el orden político existente y legitima la dominación sobre los sectores aún excluidos, en especial la clase obrera y las capas medias radicales. La segunda crisis se produce en 1931 con el golpe civil de Acción Comunal que es resuelta en forma similar incorporando a sus directivos, intelectuales de las capas medias, a la estructura partidista. En 1947 se produce la tercera crisis, con la aparición de organizaciones populares que demandan su espacio en el proceso democrático. La crisis de hegemonía no se resuelve hasta dos décadas más tarde.7
La evolución del movimiento obrero en la primera mitad del siglo XX rebasó la capacidad de los sectores políticos para crear las instituciones democráticas capaces
de ofrecer los espacios que demandaba. En los primeros lustros del siglo XX los trabajadores, en su gran mayoría extranjeros recién llegados a playas panameñas, reducían sus luchas por sus derechos a la organización así como por reivindicaciones económicas. A mediados del siglo las reivindicaciones económicas ya eran complementadas por proyectos políticos de tipo democrático. Sin embargo, el proyecto democrático no era homogéneo ni coincidía con la visión restringida de la clase política de la época. Algunos obreros buscaban afanosamente los espacios políticos que no aparecían. Otros optaban por promover alternativas revolucionarias.
En las primeras dos décadas, la clase obrera fragmentada y asociada a las obras transístmicas (ferrocarril y Canal), fue transformada por las organizaciones de trabajadores contratados por la nueva empresa del Canal de Panamá. Decenas de miles de trabajadores originarios de muchos países del mundo se incorporaron a la clase obrera entre 1904 y 1914. Tenían particularidades muy especiales que obstaculizaban su organización pero que, a su vez, les proporciona cierta capacidad para movilizar sus fuerzas.
Los gobiernos panameños desarrollaron una estrategia excluyente para enfrentar la presencia de la nueva clase obrera. Las instituciones políticas creadas en el período ignoraron a los trabajadores. La democracia se reducía al cumplimiento de los torneos electorales y, en algunos casos, a la ampliación del sistema educativo.
El sistema de apartheid impuesto en la Zona del Canal produjo un movimiento obrero fraccionado y relativamente débil. En to-do momento el gobierno panameño cooperaba con las autoridades del Canal para reprimir las manifestaciones de los trabajadores.8
El aspecto positivo de la experiencia de este movimiento social fue que dejó en la clase obrera panameña una diversidad de formas de organización cuyos efectos aún se sienten. Los trabajadores antillanos trajeron a Panamá las costumbres propias de las organizaciones laborales inglesas llamadas trade-unions. Eran disciplinadas, solidarias y aspiraban a darle a su membresía mejores condiciones de trabajo.9 Por otro lado, los trabajadores europeos, especialmente los españoles, trajeron las costumbres del anarquismo que predominaban en aquel momento en la Península. Eran trabajadores disciplinados y solidarios, aspiraban a organizar a todos los trabajadores en un solo frente para poner fin al régimen político. Desde sus filas salieron dirigentes socialistas que tuvieron mucha influencia.10
Esta rica expresión laboral se combinó con los impactos de la revolución mexicana y la revolución rusa para producir en la década de 1920 un movimiento obrero con aspiraciones que iban desde el Grupo Comunista (partidarios de la revolución socialista) hasta el Frente Obrero (partidarios del gobierno panameño de turno).
La madurez del movimiento obrero tuvo su expresión con la creación del Sindicato General de Trabajadores (SGT) a cuya cabeza se colocaron dirigentes con inclinaciones socialistas. En 1925 el SGT participó activamente en la organización de la gran huelga inquilinaria que desestabilizó al gobierno y produjo una sangrienta intervención militar norteamericana.11
A pesar de la fuerza ideológica adquirida por los trabajadores, la mayoría de los obreros organizados estaba concentrada en la Zona del Canal. En 1932 se crearon los partidos Comunista y Socialista con el fin de promover cambios revolucionarios en el país.
Con motivo de la creación del Frente Popular en 1936, el movimiento obrero organizado políticamente entró en contacto con las clases gobernantes panameñas. En el Frente Popular se combinan los partidos Comunista y Socialista con los partidos Liberal Renovador, Liberal Doctrinario y Liberal Democrático. El Partido Comunista influyó sobre los trabajadores de la zona de tránsito y el Partido Socialista ejerció su prestigio sobre amplios estratos artesanales (y campesinos). Tanto en 1936 como en 1940, los partidos populares apoyaron las candidaturas de elementos pertenecientes a la clase dominante. A la vez, presentaron candidatos propios para cargos de legisladores y concejales.12
En la última fase de este período la clase trabajadora se insertó en los procesos democráticos electorales panameños. Al mismo tiempo, el modelo de desarrollo comenzó a experimentar cambios significativos. La industrialización por medio de la sustitución de importaciones generó una nueva clase obrera, totalmente distinta a la vieja, asociada a la creación de ganancias a través del proceso de producción propiamente ta

No hay comentarios:

Publicar un comentario